El puerto, el circuito urbano de F1, la Ciudad de las Artes y las Ciencias, y más allá, el mar o la montaña, y la fusión con la Valencia histórica pueden visualizarse con las tonalidades propias de las diferentes horas del día o de la noche; o en las diferentes estaciones del año, porque esta es una terraza también pensada para el invierno.

Una de las principales condiciones era que el espacio tenía que ser flexible, es decir que permitiera cambios en poco tiempo y que estos resultaran fáciles de hacer. Con este objetivo  trabajamos con el  Waytec System de TAU-Cerámica, convirtiendo en un todo unitario lo que son pavimentos, elementos de asiento tipo bancos y jardineras. Este sistema permite realizar sin problema nuevas instalaciones de fontanería o instalación eléctrica incluso una vez finalizada la obra, o revisar las existentes. Así mismo integramos un sistema (Civis’Termia) para calefactar las zonas de asiento y hacer más agradable el uso de la terraza en invierno sin la presencia de elementos como estufas de gas que podían interferir en la visión del paisaje. Es la propia cerámica de los bancos que limitan las jardineras la que se calienta proporcionando una sensación confortable al sentarse.

La propia barra también es fácilmente transportable de un lado a otro. Para su diseño se ha combinado  Krion Snow con Krion Light Lux en las partes que tenían que ser translúcidas, como las lámparas integradas para iluminar el plano horizontal de la barra, o en la zona frontal, donde incorporamos el logotipo de Veuve Clicquot. Al tratarse del diseño de una barra corporativa  utilizamos el tono de luz amarillo anaranjado característico de la prestigiosa marca de champagne. En el diseño se integra también una champagnera; y otra particularidad es que el extremo derecho de la barra está concebido a modo de carro independiente que permite extraerse y desplazarse con facilidad al tener ruedas ocultas y un sistema de autonomía para la iluminación.

La sutil barandilla perimetral que delimita el espacio de uso la hemos diseñado en cristal y acero buscando la máxima discreción.  Creemos que la arquitectura y el diseño tienen que ayudar a vivir, por tanto la protección es lo primero, pero esto no está reñido con la discreción cuando se trata de poner en valor algo como el paisaje.